Como un reto absoluto se convierte pronunciar palabras que nos lleven a algo mejor de lo vivido.
Yo hoy retomo mis pensamientos y reflexiono sobre el camino andado.
Desde un ayer turbulento a la calma, pero una calma no exenta de movimiento. Porque la vida si es estática se queda ausente de vida.
Ha sido un año cargado, tanto de dolor, como de momentos buenos, de sueños logrados e instantes no conseguidos, de anhelos que siguen esperando y de nuevos sueños sembrados.
Ha sido un año cargado de vida y de muerte. Momentos de felicidad y de pena.
Ha sido un año realmente inolvidable.
Momentos irrepetibles que este 2015 me deja en la retina...
Imagino mis sueños dormidos
esperando quererse un poco más
para dejarse ver en las mañanas floridas de la oportunidad...
Este año he aprendido muchas cosas... Entre ellas las que creí aprendidas.
Y lo más importante es que cada día me doy cuenta de lo mucho que varían las circunstancias que nos rodean y que ciertamente ellas hacen que nuestra vida sea de una manera u otra....
Siempre creciendo en estas verdades ciegas...
La vida es un camino en fascículos...Cada año un episodio, un cierre, una etapa...A veces una continuación porque no siempre en un año eres capaz de cerrar un ciclo....
Yo solo deseo que la vida nos abrace y que cada año que empieza sea para hacernos crecer y querernos más, que nos de la oportunidad de cerra puertas si así lo necesitamos, de abrir nuevas si es lo necesario y mantenerse con el mismo paso si ha de menester.
Porque por mucho que creamos que llegamos, mientras estemos vivos, siempre habrá más... Y el reto más grande es saber aplicar lo aprendido en las situaciones que la visa nos brindará.... una y otra vez.....
Que el 2016 sea un año de luz....