Amanezco con el color de las sombras
y me quedo esperando en esta esquina camuflada.
He querido mirarte con tiento
porque los sueños suelen confundir al entendimiento.
Tengo la columna quebrada de tanto peso.
Tengo los ojos de un brillo intenso
y esconden los delirios de mi desconcierto.
Puede ser que algún día
el corazón vuelva a marcar mi tiempo,
más hoy se aleja suspicaz y lleno de miedos.
Sé que mi paz se encuentra
cuando lo tengo a cubierto.